Red Española de Reservas de la Biosfera

La experiencia que ha tenido como producto final el libro  Payoyas y Merinas. Ganaderos en la Reserva, se ha desarrollado a largo del año 2017 y parte de 2018, coincidiendo con el 40 cumpleaños de la declaración, en 1977, de la Sierra de Grazalema como reserva de la biosfera. El trabajo que  se ha centrado en la recopilación de las vivencias de 21 familias dedicadas a la ganadería en el interior de la reserva, tenía como objetivo general homenajear a los  hombres y mujeres que componían las citadas familias. Este objetivo se ha cubierto satisfactoriamente, pudiendo decirse que, además, y dada la riqueza de la información obtenida se ha podido trazar un fresco muy expresivo de lo que era la forma de vida en estas sierras en aspectos productivos, de sociabilidad, de creencias y  de relación con el medio natural. Se ha podido, así, fijar una parte de la sabiduría que atesoran los integrantes de este ancestral gremio en cuanto a sus razas autóctonas, como la cabra Payoya y la oveja Merina de Grazalema, sus costumbres, la elaboración del queso, la relación con sus perros turcos, el uso de los recursos de bosque, etc. La elección de los ganaderos y ganaderas ya jubilados ha sido muy acertada,  pues representan la generación que ha estado activa  entre los años 40 y 80 del pasado siglo XX. Un intervalo de tiempo especialmente significativo para el  ámbito rural español y andaluz, pues comenzaron su actividad tras la finalización de la guerra civil con lo cual han sido receptores de todo el universo de conocimientos, saberes, técnicas y estrategias ancestrales, y han conocido y han tenido que adaptarse, al menos en parte, a una serie de cambios importantes como los que han dado lugar al paulatino retroceso de las actividades productivas tradicionales en estos medios periféricos del campo andaluz, y de cuyos efectos son  testigos excepcionales. El número de familias ganaderas y su distribución territorial ha sido igualmente acertado, pues ha permitido  tener una imagen muy completa del conjunto de municipios de la reserva,  de las labores asociadas a cada una de las especies y la fabricación de sus quesos como producto de transformación principal. Por otra parte,  ha sido interesante el modo de obtención de la información, basada en entrevistas abiertas y flexibles, con un número de encuentros diferentes atendiendo al tiempo que cada familia pudiera dedicar a los investigadores y/o al volumen de información que  estuviera en disposición de facilitar. A todo esto esto se une la interesante información gráfica tanto de imágenes como de dibujos que completa y complementa la descripción a la par que convierte a la publicación en un libro atractivo y bello, además de útil e interesante.